martes, 16 de diciembre de 2008

Lo que hace falta: volutas color madera, el ritmo lento y habitual de un beso que aporte al día la etiqueta de sagrado.
Cambia mi cuerpo a gota de agua, tránsito y vaivén.
El día es una luna llena, la noche una bola de lumbre.

1 comentario:

tOnYtO dijo...

Sigues escribiendo bien.

Saludos :)

Soy un árbol que desea viajar en tren